El Síndrome de alienación parental. Por Martha Valfre.
Mucho se ha discutido sobre la existencia o no de este síndrome, y nuestra sociedad se encuentra dividida en cuanto a aceptarlo o rechazarlo.
Desde organizaciones feministas se niega su existencia, diciendo que es una forma de estigmatizar a las madres. Desde otros grupos con independencia del nombre que se le dé, reclaman que es algo que sucede cada vez con más frecuencia.
De qué estamos hablando?
Cuando una pareja se separa, generalmente esto no se da en buenos términos. No hace falta que se haya llegado a instancias de agresión para que haya resquemores entre los padres.-
Estas rispideces pueden llevar a que en su intento de perjudicar a la otra parte se intente formar una “alianza” con el/los hijos para que en conjunto reivindiquen su postura.-
Esta situación es extremadamente dolorosa para los niños, que no quedan inmunes al impacto psicológico negativo que estas actitudes tienen sobre ellos.-
Es así entonces que el conjunto de síntomas que comienzan a visualizarse en los niños, es la consecuencia del uso de diferentes estrategias por parte de un progenitor, en las que ejerce influencia en el pensamiento de los hijos con la intención de destruir la relación con el otro progenitor.
Y a esto se lo llama Síndrome de Alienación Parental.-
El SAP puede ocurrir cuando el hijo es influenciado por un progenitor (progenitor A) para rechazar al otro progenitor (progenitor B).
Por ejemplo, el progenitor A puede decirle al hijo que el progenitor B no quiere visitarle, cuando, en realidad, el progenitor A niega al progenitor B la posibilidad de verlo.
Este tipo de influencia negativa, utilizada de manera sistemática, provoca que el hijo rechace al otro progenitor.
Es importante que los técnicos intervinientes puedan discriminar si existe un peligro real de que una de las partes utilice estas conductas para dañar a la otra parte, ya que el niño es “quien paga la factura emocional” o estamos frente al caso de que se acuse al otro miembro de la ex-pareja por utilizar SAP en su contra aunque no sea cierto.
Señales del Síndrome de Alienación Parental
¿Cómo identificar si estamos frente a este síndrome?
Menospreciar, insultar o desvalorizar al otro progenitor delante del niño, mencionando temas de la pareja que no tienen que ver con el vínculo parental (temas económicos, infidelidades, etc)
Contarle a un hijo los detalles de la separación si la otra parte fuese el culpable.
El progenitor lo que busca es que el niño piense que el otro progenitor es el victimario y que, de esta manera, no empatice con él.
Influir en los niños con mentiras sobre el otro llegando a asustarlos, buscar excusas para no permitir las visitas, inventando enfermedades, certificaciones, etc. Incluir al entorno familiar y a los amigos en los ataques al otro progenitor.
Subestimar o ridiculizar los sentimientos de los niños hacia el otro progenitor. Gratificar y reforzar los comportamientos despectivos y de rechazo por parte del niño hacia el otro progenitor.
Causas de este fenómeno
Evidentemente las causas pueden ser varias pero en general estas son algunas:
Enojo acumulado por no haber manejado las dificultades de pareja de forma adecuada.
La falta de control de la ira puede provocar, en estos casos, que los progenitores no sean capaces de separar los problemas de la relación de sus funciones parentales.
Problemas de autoestima.Lo que provoca dependencia emocional hacia el otro progenitor.
Que la separación haya sido voluntad de la otra parte
Trastornos de personalidad.
Por ejemplo: narcisismo o Trastorno Límite de Personalidad.
Conclusiones
El SAP es una forma de maltrato infantil, y cuanto más tiempo se haya producido entre su inicio y detección más tiempo de psicoterapia será necesario para mitigar las consecuencia negativas en la psique del niño y para reconstruir el vínculo afectado con el otro progenitor.-
MARTHA VALFRE
Abogada y Psicóloga.
